el escenario que el 21 de mayo acogerá la final de la Europa League vivirá un duelo de similares características, aunque sin trofeo para entregar al término del encuentro. Es más, la Ertzaintza aprovechará para realizar con los aficionados romanistas -alrededor de 2.100 con cerca de 400 radicales en el grupo- un ensayo de cómo será ese día el acceso al estadio y el perímetro de San Mamés se ha acotado parcialmente para ordenar el tránsito. Y todo porque Athletic y Roma se cruzan por un puesto en los cuartos de final. Los leones, que están obligados a remontar, han concienciado a su gente de que todo lo bonito que se ha dibujado en la proyección de un gran curso europeo pasa por ganar a la Roma. Aquí y ahora. No hay más.
Cómo llega el Athletic
La eliminatoria está cuesta arriba por culpa de un gol en el último segundo del encuentro de ida. De no haber marcado allí la Roma el partido estaría equilibrado. Ganar por un tanto llevaría a la prórroga y aumentar la diferencia clasificaría en 90 minutos. Es un reto que está al alcance de los de Valverde. El Txingurri perdió en la ida a sus centrales titulares (Vivian y Yeray) y poner coto al ataque giallorosso dependerá de Paredes y Nuñez. El equipo está preparado para un partido largo, pero también es consciente de que yendo por detrás en el marcador le conviene manejarse con viveza. La clave estará en encontrar el equilibrio, sin precipitarse en los ritmos, y acertar en las áreas.
Cómo llega la Roma
El equipo de Claudio Ranieri pretende convertir en oro el gol de Shomurodov en el Olímpico y llevar a término la concepción de resistencia y capacidad para aguantar y mejorar las ventajas que históricamente tienen los conjuntos italianos en competiciones europeas. La Roma se presenta en San Mamés animada por su gran racha bajo el mandato de Ranieri, que para el partido ante el Athletic recupera a Leandro Paredes, potente centrocampista que estuvo sancionado en la ida. La duda del técnico está en la zaga, con Hummels como candidato al puesto de Celik, renqueante de problemas musculares.
El duelo de partido
Agirrezabala vs Svilar. En un partido decisivo no queda otra que mirar a las porterías. En lo que consigan hacer Agirrezabala (1,12 goles por partido) y Svilar (0,9 goles por encuentro) estará buena parte de la eliminatoria. En el caso del portero del Athletic el patido tiene un añadido extra, pues no es el que juega en LaLiga y sin Europa le quedaría un comprometido final de campaña.