La planificación de la próxima temporada en el Granada ya está en marcha, un trabajo con muchas incertidumbres y algunas certezas, como la presencia de Weissman en la plantilla de la próxima temporada.
El club andaluz logró en el pasado mercado invernal la cesión del goleador israelí, en una operación donde se incluyó una opción de compra obligatoria en caso de ascenso, supuesto que felizmente se ha producido.
Teniendo que cumplir con sus obligaciones, el cuadro rojiblanco deberá abonar al Valladolid una cantidad algo superior a los tres millones de euros, haciéndose de esta forma con los derechos en propiedad del punta, que se convierte así en el primer fichaje oficioso para la próxima temporada.
Aunque Paco López siempre se ha deshecho en elogios con Weissman, la realidad es que el rendimiento del delantero ha estado por debajo de lo esperado y en el tramo final del campeonato ha tenido que asumir un papel secundario. Ante esta situación, uno de los primeros retos que tendrá sobre la mesa el técnico valenciano para el próximo curso será el de buscar la mejor versión de Weissman, que debe ser uno de los referentes del equipo en su vuelta a la máxima categoría.
Desde su llegada a Los Cármenes, Weissman parece haber perdido su olfato goleador, y sólo fue capaz de perforar la portería rival en su debut, acumulando posteriormente quince encuentros sin marcar, una sequía preocupante. A pesar de estas cifras, en el Granada siguen confiando ciegamente en el potencial goleador del israelí y esperan que en Primera el atacante sea capaz de desplegar todo su potencial.
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