Alexander Zverev avanza con muy buena pinta en el US Open. La versión más fiable del alemán ya está en las semifinales del torneo, después de apabullar al sudafricano Lloyd Harris, al que venció por un contundente 7-6 (6), 6-3 y 6-4 en 2:06. El alemán de 24 años y número cuatro del mundo, llega a la penúltima ronda con un solo set y cuatro saques perdidos en cinco partidos. Se enfrentará a Novak Djokovic, que remontó ante Matteo Berrettini.
Zverev, que se había relajado en algunos momentos de su partido de octavos contra Jannik Sinner, se pudo serio contra el peligroso Harris, que viene jugando muy bien y que no hace mucho, en Washington, ganó a Rafa Nadal, si bien el balear jugaba lesionado. Le colocó 43 golpes ganadores, 21 de ellos de saque directo, a un tenista que acreditaba muy buenas cifras en esos apartados. Hay un dato muy significativo que ofrece la ITF sobre Sascha, en este torneo lleva 15 dobles faltas en total, uno de los problemas que le frenaban en el pasado, cuando en la edición anterior hizo más de diez en cuatro de los siete partidos que disputó. Ahora aspira a repetir final con la experiencia dolorosa de la que perdió el año pasado contra Dominic Thiem, cuando la tenía más que controlada.
El jugador de Hamburgo está en la mejor racha de victorias de su carrera, 16, y ha ganado 37 de los 40 sets que ha disputado este verano entre los Juegos Olímpicos de Tokio, Cincinnati y Nueva York. Esas son las cifras que le avalan para intentar dar el salto de calidad definitivo en los Grand Slams, aunque el enemigo que le va a tocar no será nada fácil.