
Militao y Alaba comparten convocatorias por primera vez desde que las lesiones aparecieron en sus carreras para separarlos. Lo que no han conseguido desde hace ya más de dos años es volver a compartir once como pareja de centrales. Han ido apareciendo uno y otro en los pocos momentos de tregua que les han dado los problemas físicos, pero juntos ha sido una misión imposible desde 2023. Un muro de época protagonista de la Decimocuarta de París que se cayó y que ya tiene difícil arreglo después de tanto tiempo.
Militao y Alaba debutaron juntos en el once como pareja de centrales el 28 de agosto de 2021, en la tercera jornada de Liga. Las lesiones de Marcelo y Mendy en el comienzo de la 21-22 retrasaron el estreno, ya que obligó a Ancelotti a utilizar al ex del Bayern en el lateral zurdo en los dos primeros encuentros ante Alavés y Levante. Así que no fue hasta el Villamarín cuando entraron en escena. El estreno no pudo ser mejor: victoria y portería a cero.
Claves en el triplete de la 21-22
Esa temporada jugarían juntos como pareja de centrales en 38 partidos de los 56 que disputó el Real Madrid (68%), con un balance de 28 victorias, cinco empates (Villarreal, Osasuna, Cádiz, Elche y Villarreal) y cinco derrotas (Sheriff, Getafe, PSG, Barcelona y City). Además, con ellos al frente de la zaga, el Madrid dejó la portería a cero en 17 ocasiones, encajando 28 goles. Con ellos como ‘muro’, el equipo sólo fue perdiendo durante 415 minutos de los 3.420 que jugaron juntos de centrales (12%).
Militao: «En la segunda lesión de cruzado pensé en dejar el fútbol»
Unos números con los que hicieron olvidar a la legendaria pareja que formaron Ramos y Varane. La marcha de los dos a la vez en el verano de 2021 puso al Real Madrid en un serio problema. Sustituir de golpe a la pareja de centrales titular no era una tarea sencilla. La solución fue fichar a Alaba por Ramos y por Varane, la apuesta fue Militao, que tras un comienzo delicado como madridista había cogido impulso. La decisión resultó un éxito rotundo. La fórmula funcionó y la conexión de la nueva pareja de centrales fue clave en el triplete blanco. Su coronación definitiva llegó en París, con la conquista de la decimocuarta Champions.
El Madrid se frotaba las manos con su nueva pareja y miraban al futuro con la tranquilidad de haber solucionado el problema para unos cuantos años. Pero todo se fue torciendo poco a poco hasta que el muro llamado a marcar una época quedó hecho añicos. La siguiente temporada las lesiones empezaron a castigarles, principalmente a Alaba, que sólo disputó 39 partidos. Su participación juntos se redujo a 17 partidos como pareja de centrales titular. El balance, 15 victorias (88%) y sólo dos derrotas (Rayo y City), con seis porterías a cero (35%).
El comienzo de la ‘maldición’
La siguiente temporada, el ‘muro’ se cayó definitivamente. Militao se rompió el cruzado en el primer partido de la temporada, en San Mamés ante el Athletic el 12 de agosto de 2023, y a partir de ahí una sucesión de lesiones de gravedad han impedido que Militao y Alaba hayan podido volver a formar juntos de inicio como pareja de centrales. El brasileño vuelve a ver la luz tras romperse dos veces el cruzado. “Con mi segunda lesión, pensé en dejar el fútbol. No es fácil atravesar todo eso”, confesó recientemente. Una situación idéntica a la de su compañeros, que también ha vivido un calvario las dos últimas temporadas con tres operaciones de rodilla y otras tantas lesiones musculares. «Me siento muy bien y hacía tiempo que no era así», dijo por su parte Alaba semanas atrás. Una pareja separada por las lesiones, que les han castigado con dureza.
Una ‘muro’ imposible de levantar más de dos años después de que se cayese por primera vez. Después de mucho tiempo están los dos disponibles para Xabi, pero ahora les separa un obstáculo deportivo. Militao ha recuperado su condición de ‘titularísimo’, pero Alaba ha perdido su estatus y ahora mismo, sin contar a Rüdiger, es el cuarto central tras Asencio. Aún así, Alaba ya ha disfrutado de una titularidad, ante el Kairat en la Champions, partido en el que Militao fue baja por lesión. Fue la enésima ocasión en la que el destino dio la espalda a una pareja galáctica a la que se le niega volver a juntarse. Eso sí, siempre les quedará París.
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