Josan Fernández ha hablado en la previa del trascendental choque ante el Getafe sobre la importancia que puede suponer ganar para la moral del vestuario. Junto a Gonzalo Verdú, es el único superviviente de aquel Elche que militaba hace cinco temporadas en Segunda B, por lo que siente como el que más la situación tan delicada del conjunto franjiverde, que es colista tras once jornadas en las que no han conocido la victoria.
Duelo ante el Getafe
Sobre el choque del lunes, el extremo crevillentino ha calificado de «punto de inflexión» el ganar al conjunto azulón. Sobre el equipo de Quique Sánchez Flores, ha mencionado que es un equipo con grandes jugadores que se ha reforzado muy bien durante este mercado estival: «No le están saliendo bien las cosas y es un equipo parejo con nosotros por lo que tenemos que ganar para recortar puntos y salir del descenso».
‘Efecto Almirón’
Tras la llegada de Jorge Almirón al banquillo del Elche, el equipo ha sacado dos puntos de nueve posibles tras empatar en Mestalla y en Cornellá y caer ante el Real Madrid. Sobre ese asunto, Josan ha reconocido que desde la llegada del técnico argentino el equipo ha mejorado la imagen dentro del campo, en parte gracias a que siempre que hay cambio de entrenador los jugadores toman una nueva actitud de querer más para ganarse un puesto en el once titular y «competir un poquito más».
«Creo que él ya me conoce de la anterior etapa, sabe lo que le puedo dar y sé lo que él quiere, en su anterior etapa lo jugué casi todo, creo que hice unos buenos partidos y creo que por ahí se explica que vuelva a jugar. Di buen rendimiento con él y creo que lo puedo volver a hacer», ha destacado el jugador franjiverde sobre su relación con Almirón.
Los fichajes
Muchos de los fichajes que se hicieron en este mercado apenas están rindiendo al nivel que se le esperaba, sobre ese asunto, Josan ha querido quitar importancia y confiar en su talento: «Lógicamente los fichajes se hacen para mejorar la plantilla, aunque muchos de ellos no le están saliendo las cosas. Están trabajando mucho y lo que puedo decir es que la integración ha sido más complicada porque llegaron más tarde, trabajan como los que más y si no salen las cosas son los primeros afectados son ellos porque anímicamente no están bien».
Ahora el calendario para el conjunto ilicitano es de vida o muerte antes del parón por el mundial de Qatar, donde en apenas ocho días reciben al Getafe, viajan a Valladolid y vuelven a recibir al Girona. Tres rivales directos en la lucha por la permanencia en los que el crevillentino ha dicho que pueden ser un punto de inflexión para llegar tranquilos al mundial o puede complicar todavía más la situación. «Tenemos que sacar los tres partidos» ha añadido.
Mensaje optimista
Por último, ha querido mandar un mensaje a la parroquia ilicitana para que respalden al equipo en los próximos encuentros: «Sabemos que no nos van a abandonar porque son un ejemplo. Trabajamos al máximo, en los entrenamientos trabajamos muy bien. Actitud no nos falta, tenemos que corregir cosas, esos errores puntuales, venimos con una dinámica mejor de juego y actitud. Estamos mejor con más confianza y el lunes tenemos que plasmar eso para ganar el partido».