El entrenador del Elche, Pablo Machín, analizó el empate de su equipo frente al Cádiz (1-1) en el Nuevo Mirandilla. Un resultado que considera «justo», pero que «clasificatoriamente dice poco» por la necesidad franjiverde. El equipo ilicitano, colista de Primera, sigue sin ganar tras 17 jornadas, en las que sólo ha sumado cinco puntos. Ve la zona de permanencia a doce puntos de desventaja.
«Ha sido un partido muy igualado. Lo más justo era lo que no queríamos ninguno de los dos, el empate. Para nosotros, ha sido más dificultoso, porque nada más empezar hemos vuelto a sufrir el varapalo del gol. A partir de ahí, el partido ha estado igualado, con más a nuestro favor en la segunda parte. Tuvimos el premio merecido del gol. A partir de ahí, dos equipos que querían ganar, desorden y transiciones. Cualquiera podría haber marcado».
«Veníamos a por los tres puntos. Tenemos una situación muy delicada. Quiero ser optimista. No es nada fácil, después de recibir un gol nada más empezar con la situación que tenemos. Propiciado también por acciones previas que podríamos haber hecho mejor, pero esta ansiedad lleva a no decidir bien. Que el equipo no se haya descompuesto, fuéramos a por la victoria y empatáramos, nos reconforta anímicamente, pero clasificatoriamente dice poco. Hay que competir, que era clave, y lo hemos hecho corroborado con un punto».
«Cuantas más ganas de hacer las cosa bien tienes, esa sobrepresión hace que no decidamos bien. Tenemos la posibilidad de despejar bien, pero despejamos a córner. Luego, presionamos de cualquier manera. En Primera, das una mínima ventaja y encajamos un buen gol. Después, hemos querido. Con los infortunios que tenemos, la gente del banquillo nos ha dado frescura y ganas».
«Que el equipo no está muerto. Quiere, es lo primero para demostrar que podemos. El premio es justo, pero no es lo que buscábamos. Significa crecer desde donde veníamos».
«Creo que sí, pero tenemos que corregir errores que son por deméritos nuestros. No debemos estar tan nerviosos y con tanta sobrerresponsabilidad. Sabemos que tenemos una afición detrás, y esa responsabilidad hace que no desarrollemos el juego como sabemos. Pero somos profesionales y debemos saberlo llevar».
«Sabíamos que es complicado. Se trata de hacer un equipo competitivo, que siga teniendo opciones en todos los campos. Esa victoria seguro que llegará. Vamos paso a paso, hasta donde lleguemos. El equipo da visos de que ni mucho menos está muerto. Lo demostraremos en el próximo partido».
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