El RCD Mallorca sigue trabajando en confeccionar una plantilla equilibrada para la nueva temporada. Dentro de esa planificación, la variedad debe ser muy amplia y la dirección deportiva liderada por Pablo Ortells no cesa en la búsqueda de perfiles interesantes para el equipo. En ese radar, el nombre de Kuryu Matsuki ha aparecido y el Mallorca no ha tardado en interesarse por este joven jugador japonés, tal y como puede avanzar MARCA.
Considerada como una perla en el contexto japonés, Matsuki (de tan solo 20 años) está en la agenda del Mallorca. La entidad balear ya ha preguntado por él a su actual club, el FC Tokyo, y la respuesta desde Japón es clara: el jugador vale 3 millones de euros. La proyección del joven futbolista es un punto a tener muy en cuenta. Es el capitán de la Selección japonesa sub20, fue titular en el Mundial sub20 disputado hace dos meses en Argentina y en dicha competición anotó un gol, el de la única victoria de Japón en el Mundial sub20 ante Senegal.
Pese a su corta edad, Matsuki ya suma casi 50 partidos disputados en la Primera División japonesa con el FC Tokyo -donde además ha marcado 3 goles y repartido 8 asistencias-, y sería un nuevo paso para el Mallorca en su estrategia de continuar con su buena sintonía en el mercado asiático. El centrocampista japonés puede jugar tanto de enganche -un teórico ‘11‘- con los delanteros como de ‘5‘, por lo que se trata un futbolista polivalente e interesante para Javier Aguirre.
El mercado asiático, una prioridad para el Mallorca
La marcha de Kang-In Lee deja huérfana una plantilla donde el toque asiático había estado presente en las últimas temporadas en Primera División. En 2019 fue Take Kubo quien llegó al Mallorca; el propio Take, en 2021, gozaría de una nueva etapa en la isla. Ahí se formaría un tándem con Kang-In Lee que únicamente duraría una temporada. Mientras que el japonés empezaría su andadura con la Real Sociedad, Kang-In se quedó en Mallorca para dar su paso definitivo. Ahora, con su venta al PSG, Matsuki podría ocupar ese hueco.
De ser así, el japonés se convertiría en el sexto asiático en vestir la elástica bermellona. El primero de todos fue Yoshito Okubo. Tras él pasaron Akihiro Ienaga, Ki Sung-Yueng y los mencionados Take y Kang-In.