César Montes ha sido el último futbolista rojiblanco en incorporarse al equipo tras su paso por la selección mexicana, con quienes ha disputado los 180 minutos correspondientes a los dos partidos del combinado tricolor ante Ghana y Alemania. El central, que quedó fuera de la lista en el primer parón por selecciones en septiembre, sí recibió la llamada de México esta vez, a pesar de estar recién salido de lesión.
El defensa más caro de la UD Almería se lesionó en el fatídico partido de liga ante el Sevilla en el Pizjuán y, regresó poco más de una semana después para el partido que les enfrentaba al Athletic Club de Bilbao. Sin embargo, Montes llegó a aquel partido muy justo, entrenando con normalidad únicamente el día previo al encuentro, lo que lógicamente le apartó del once titular y ni siquiera llegó a disputar minutos al final.
Al día siguiente, sábado 7 de octubre, el ex del Espanyol viajó hasta Madrid para coger un vuelo directo hasta Charlotte (Carolina del Norte), donde se disputó el primero de los dos encuentros con Montes como titular. De allí, la selección mexicana se desplazó hasta Filadelfia (Pensilvania) para el segundo choque que les enfrentó ante Alemania y donde César Montes volvió a acumular los 90 minutos de juego con un resultado final de empate a dos. De hecho, según ha podido saber MARCA, el club almeriense advirtió a los servicios médicos del combinado mexicano el estado en el que llegaría el defensa tras estar inactivo por una lesión muscular y se les solicitó que se tuviese prudencia con él. No obstante, tras la exploración de los servicios médicos de la tricolor y entender que estaba en disposición de jugar, se tomó la decisión de que no se perdiera ni un solo minuto, algo que no ha caído en gracia en el seno de la UD Almería, ni en su propio entrenador.
Una odisea de regreso
La locura de viaje para César Montes cogió otra magnitud a la hora de tener que regresar hacia Almería. La Federación Mexicana de Fútbol había previsto un itinerario que permitía a Montes llegar a Almería en la madrugada del jueves al viernes, pero no convencía al futbolista porque se habría perdido el entrenamiento de esta mañana y su intención era participar en los das últimas sesiones de Garitano. Por ello, decidió darle una vuelta al itinerario y terminó partiendo en coche desde Filadelfia a Nueva York (aproximadamente una hora y media), y desde ahí a Barcelona «en un vuelo especialmente cuadrado para poder dormir y evitarse el jet-lag al aterrizar en España», según ha informado Relevo. El vuelo que le hizo cruzar el charco tuvo una duración de ocho horas y aún le quedaban otros dos aviones más que coger. Desde Barcelona fue hasta Madrid y desde la capital finalmente pisó tierras almerienses en la tarde-noche del día de ayer según ha comentado Garitano en la rueda de prensa de este mediodía.
Es decir, en total han sido 14.912 kilómetros entre ida y vuelta, de los que 7.236 se hicieron en menos de 24 horas, repartidos entre un coche y tres aviones. Este esfuerzo ha sido bien valorado por el club y la afición. De hecho, estos últimos criticaron mucho a Montes por «irse lesionado con su selección y sin jugar con el Almería».
Garitano no se muerde la lengua
El técnico vasco de la UD Almería se ha mostrado contundente con la situación que ha vivido en los últimos días César Montes al ser preguntado por ello en sala de prensa: «El trajín que llevan algunos futbolistas es importante. Nosotros tenemos el ejemplo de Montes que no juega los últimos partidos con el Almería porque está tocado y viaja con la selección, juega dos partidos de 90 minutos con México y viene ayer por la tarde-noche desde Estados Unidos, llega hoy reventado y lo necesitas para el domingo. Al final el club que le paga es el Almería, pero resulta que no puede jugar antes con ellos y sí con su selección y ahora llega en avión después de un viaje transoceánico… Pues eso es lo que hay, pero lógicamente este tipo de cosas luego se acaban pagando». Garitano ha confesado que el central ha podido hacer algo esta mañana, pero ha estado lejos de entrenar al ritmo de sus compañeros por el agotamiento físico de los partidos y el viaje. Aun así, el mexicano entrará en la convocatoria para viajar a Girona y no hay que descartar del todo que pueda jugar de inicio, teniendo en cuenta que la situación del club no permite no alinear a los mejores, aunque son conscientes de que hay un mayor riesgo de lesión.