
Tener una plantilla tan a mínimos provoca que cualquier percance sea complejo de darle una solución y ha ocurrido en este Valencia. Una lesión, la de Diakhaby, y una venta rápida en el mercado de invierno, caso de Paulista, deja bajo mínimos un línea, la de zagueros, al límite. El Valencia va tener que afrontar lo que resta de campeonato con tres centrales natos en la plantilla con una experiencia limitada. Se trata de los casos de Mosquera, Cenk y Yarek.
Entre los tres no acumulan ni 100 partidos en máxima élite. Es normal, la media de edad de los tres apenas es de 20 años. Mosquera cuenta con 19 años, Yarek tiene los mismos mientras que Cenk suma 23 primaveras.
A todo ello, van a tener que asumir toda la presión en este tramo final. Es una responsabilidad pero este Valencia destaca por dar ese rol a cualquier jugador tenga la edad que tenga. Así está construido este Valencia con algún veterano que ayuda. Pero ahora, el veterano -y eso que Diakhaby tiene 27 años- tampoco va a estar.
En resumidas cuentas, al Valencia le quedan 14 partidos de Liga y lo va a afrontar con tres centrales como Mosquera. Cenk y Yarek. El primero acumula 37 partidos en la élite, el segundo suma 36 (aunque 35 más cuando estuvo cedido en Bélgica en una liga de menor nivel con el Leuven) mientras que el tercero apenas 11.
Posiblemente no se encuentre otro equipo para afrontar la alta competitividad de la Liga como la española con una media de edad de 20 años y sobre todo con una media de partidos en la élite de… ¡37 partidos!