
Son seres humanos más allá de las leyendas, los récords, las fortunas, la fama mundial. Y se quiebran, como todos.
Esa fue la imagen que dejó Cristiano Ronaldo tras fallar un penalti en el duelo entre Portugal y Eslovenia, por los octavos de final de la Euro 2024.
Frente a frente con Oblak, como cuando un derbi Real Madrid vs Atlético, el portero le adivinó y le atajó a puro talento:
Fue justo en el tiempo extra, era el momento para asegurar la clasificación y agigantar la leyenda pero falló, porque el rival fue mejor y porque puede pasar… siempre puede pasar.
Lo que nadie vio venir fue la reacción del legendario goleador, quien en la charla del descanso de ese tiempo añadido simplemente se quebró. Abrazado y rodeado por sus compañeros lloró como un niño, desconsolado, ante el asombro de todos en Alemania y casi en el mundo.
Así fue la reacción del ídolo: