La Selección Colombia volvió a jugar tras su subcampeonato en la Copa América ante Argentina y cuando parecía que los dirigidos por el técnico Néstor Lorenzo iban por una victoria importante ante Perú en Lima, el equipo se vio bastante desdibujado pese al 1-1 final.
Lorenzo tuvo varias sorpresas en el equipo titular y una de las grandes novedades fue la ausencia de James Rodríguez, quien esta vez no lideró al equipo desde el inicio por no llegar con muchos minutos de juego, pero los demás jugadores que estuvieron en el mediocampo no tuvieron su mejor presentación.
A lo largo del partido se vio una Colombia con bastante dificultad para generar juego desde el mediocampo y parecía que la ausencia del diez estaba afectando, pero a nivel general Jhon Arias, Jefferson Lerma y Richard Ríos lograron conectar de la mejor manera.
Pese a que el mediocampo tuvo una buena calificación, su labor se vio afectada por no tener un acompañante que lograra aportar al ataque y Jhon Arias, quien era uno de los que debería liderar, no fue tan decisivo para surtir a los delanteros.
Tras la poca sincronía y con un mediocampo perdido, Lorenzo decidió hacer algunos ajustes para el complemento y sacó a Jhon Arias, Luis Sinisterra y Jhon Córdoba para ingresar a James Rodríguez, Yaser Asprilla y Jhon Durán.
Sin embargo, la presencia de James y Yaser Asprilla fueron determinantes, aunque más la de la nueva joya del Girona, quien fue el que le dio ese plus al ataque de Colombia, logrando llegar con intensidad. Además de ello, se sumó la pauta del diez de Rayo Vallecano y eso le permitió al equipo tener un mejor funcionamiento.
Al final, el mediocampo tuvo un oxígeno diferente y con la presencia de James, Asprilla y Durán en ataque, se consiguió un mejor juego que le permitió al seleccionado sumar un punto valioso para seguir invicto en Eliminatorias, pero queda la sensación de que no fue la mejor presentación del equipo.