Raphinha siempre tuvo muy claro que quería ser importante y dejar su huella en el Barcelona. Pero hasta ahora no terminaba de mostrar su mejor versión y, además, las lesiones también han sido un hándicap. Le ha tocado lidiar con jugadores de la talla de Dembélé o Lamine Yamal y ha tenido que ser desde el extremo izquierdo o, incluso, la mediapunta , donde ha encontrado la seguridad para brillar. Está firmando un inicio de temporada que nada tiene que ver con su rendimiento de los dos últimos años.
Además, el brasileño asume con responsabilidad, ganas y sin complejos, el rol de líder. Ha lucido el brazalete de capitán este curso, debido a las muchas bajas por lesión. Está ‘desatado’ con su juego, implicación y actitud, y los números le avalan. Ha llegado a este segundo parón, ahora está concentrado con Brasil, con seis goles y seis asistencias, entre las dos competiciones. Además, sólo ha sido suplente en una ocasión, en la única derrota del Barcelona en LaLiga contra Osasuna.
El editorial de Miguel Quintana: «Capitán Raphinha»
En el campeonato regular, Raphinha lleva cinco asistencias en los nueve encuentros disputados. Es decir, una media de 0,56. En LaLiga dio un pase decisivo contra Valencia, Rayo, Valladolid y dos, contra Alavés. En la Champions, contra el Young Boys. En cuanto a goles, el brasileño ha visto puerta en tres ocasiones contra los pucelanos y dos, en el Estadio de la Cerámica. También estrenó su casillero personal en Europa.
Ahora luce 6 goles y 6 asistencias y la temporada pasada terminó con 10 y 13, respectivamente teniendo en cuenta todas las competiciones. En la 22-23, se quedó en 10 y 12. Por lo tanto, Raphinha va camino de superar sus registros.
En la 23-24, el brasileño tuvo un inicio muy movido. Fue titular en el primer encuentro de la temporada, pero vio la tarjeta roja y fue castigado con dos compromisos. En la jornada 4, 5 y 6 disputó algunos minutos saliendo desde el banquillo y, en la 7, saltó al césped de inicio. Pero en la 8 se lesionó. En estos encuentros marcó dos goles y dio una asistencia. En la Champions se midió al Amberes y firmó dos pases de gol.
En la 22-23 tuvo protagonismo pero no incidencia. Fue titular en 6 de los primeros nueve partidos de LaLiga y en los otros tres tuvo minutos, pero sólo firmó un gol y una asistencia. En Europa ya se habían jugado, a estas alturas, tres choques pero no había logrado ningún tanto ni pase definitivo.
Hansi Flick ha sacado ya la mejor versión de Raphinha. El brasileño, que no admite rotaciones, se ha aferrado con fuerza a la titularidad. Forma un tridente de lujo con Lewandowski y Lamine Yamal.
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