El Betis acudía a Pamplona, a uno de sus estadios talismán, con la obligación de volver a ganar tras firmar dos derrotas antes del parón -Legia Varsovia y Sevilla- y reafirmar su proyecto. Manuel Pellegrini dijo que no había visto al equipo en crisis ni falto de confianza en ningún momento, pero el temor a un tercer tropiezo era latente. El runrún aparece cuando los resultados no acompañan y las bajas tampoco ayudan al cuadro verdiblanco en este punto de la temporada. Las ausencias de Isco, William Carvalho, Marc Roca, Sabaly y sobre todo Lo Celso obligaron al Ingeniero a retocar su plan y dibujar un cambio de sistema para paliar la falta del argentino.
Pellegrini apostó de inicio ante Osasuna por un 4-4-2 como solución, un sistema diferente del 4-2-3-1 que utiliza desde siempre en el Betis, con dos delanteros de inicio -Vitor Roque y Bakambu-, y que fue adaptando con los cambios. Una alternativa que le dio resultado con una muy buena primera media hora, con dos delanteros viendo puerta, con Fornals más libre y generando situaciones peligrosas con pases en profundidad, con una presión muy alta y con dos laterales largos que llegaron bien arriba, en especial Héctor Bellerín.
El Ingeniero, como señaló tras el partido, no se quedó pensando en los jugadores que le faltaban sino que se centró en sacar partido a lo que tiene y más con un calendario vertiginoso por delante que encara de la mejor forma posible: ganando. El Betis de Manuel Pellegrini sigue siendo fiable, en el césped trabajó como un equipo con todo lo que eso significa y nunca está solo. Medio millar de aficionados verdiblancos se hicieron sentir en Pamplona.
Natan se perderá por sanción el próximo partido de Liga frente al Atlético de Madrid en el Benito Villamarín. Antes, este próximo jueves, el Betis recibirá al Copenhague en la Conference League. A Pellegrini le toca seguir haciendo malabares y dosificar jugadores para afrontar la semana con garantías. Vitor Roque sintió una contractura en ambos gemelos y Rui Silva terminó tocado en la visita a Osasuna. La competición no da un respiro. El Betis suma tres puntos que le permiten subir en la tabla. Es un momento clave de la temporada y tendrá que hilar fino.