El Valencia trató de subirse al efecto Corberán en el estreno del técnico de Cheste en LaLiga ante un Real Madrid que buscaba el liderato. Pero no le alcanzó para sacar nada positivo ante un rival que buscó la victoria y la encontró a pesar de las adversidades y de quedarse con diez en el minuto 80’, por expulsión de Vinicius, con 1-0 por debajo en el marcador. El disparo de Rioja que repelió la escuadra en el minuto 99 de partido es un reflejo del Valencia.
No tiró de revolución en el once titular el nuevo entrenador. Finalmente optó por Yarek para poder armar una defensa de cinco, con Rioja de carrilero, en fase defensiva. Barrenechea, Javi Guerra y Almeida le dieron sentido a la posesión, aunque fue decayendo poco a poco conforme pasaban los minutos y el Madrid se volcaba en la portería de Dimitrievski.
El equipo blanquinegro entró al partido con la intensidad que requería el rival y la situación en la tabla. Los siete disparos, cinco a puerta, un gol, y dos grandes paradas de Courtois en la primera parte mostraban a un Valencia más agresivo en ataque. Aunque le faltaba consistencia. Tras el gol de Hugo Duro el Valencia mejoró en la gestión de una ventaja en el marcador.
Pero ni siquiera esa parte de fortuna que se necesita en estas ocasiones, y que le fue de cara a los blanquinegros, les alcanzó para lograr algo positivo. Bellingham estrelló un penalti en el palo y a Mbappé le anularon un gol por la puntera de una bota. Y por si faltaba poco, Vinicius se autoexpulsó al golpear a Dimitrievski tras una provocación del meta macedonio que saldó con amarilla. Fue el VAR el que avisó a Soto Grado.
Pero el partido no se acababa ahí. El Madrid siguió apretando con un menos y llegó el gol del empate de Modric. Al Valencia le fallaban las fuerzas y no le duraba el balón. Otro error en el centro del campo lo aprovechó Bellingham para ahogar el efecto Corberán.