El vaticinio de víspera de Valverde se cumplió. El técnico dio por ganador de la semifinal al equipo que se pareciera más a sí mismo. Y eso implicaba que lo hiciera por más tiempo. El Athletic, de salida, no respondió como acostumbra. No fue ese equipo todoterreno que aprieta al rival en todo momento y le plantea retos cada vez que se mete en campo contrario. En el inicio estuvo nublado en Arabia y lejos de su plan habitual. Por ahí se le fue un buen tramo del partido.
Los leones dieron más carrete del deseado al Barcelona. Y cuando quisieron regresar a lo que mejor conocen ya era tarde. Encima también se le acabó la fortuna porque en los diez últimos minutos del encuentro le anularon dos goles, uno a De Marcos y otro a Iñaki Williams. El mayor de los hermanos fue el primero en analizar el partido y apostó por una regeneración inmediata. “Siempre que juegas ante el Barcelona sabes a lo que te expones. Ir contra remolque es complicado. El Barça tira la línea muy adelante, pero no hemos conseguido esos pases buenos para romper su línea. La temporada no acaba aquí y ahora tenemos todavía cosas muy ilusionantes por las que pelear”, comentó sobre el mismo césped del estadio nada más concluir el encuentro.
El futuro de Herrera y Serrano
La Supercopa se fue sin minutos para Herrera, que está en la agenda de Boca Juniors para incorporarse ya al campeonato argentino, participar después en el Mundial de Clubes y si está convencido de seguir en activo continuar jugando allí la próxima campaña. El asunto se desbloqueará esta semana porque a ninguna de las partes le conviene que se dilate en el tiempo. En cambio, el duelo ante el Barça sí tuvo oportunidad para Nico Serrano, que no ha tenido mucha participación este curso y tiene interés de varios equipos para contar con su cesión. Valverde, eso sí, no está por dejar salir a los dos porque le descapitalizaría la plantilla.
Los poderes de Simón
Unai Simón estuvo a la altura de lo que es. Uno de los mejores porteros del mundo. El internacional rojiblanco, todavía en periodo de rodaje tras la operación en la muñeca derecha a la que se sometió tras la Eurocopa, jugó su primer gran partido desde el pasado verano. Y mantuvo con vida al Athletic.
El de Murgia tuvo enfrente a Szczęsny, que es un portero que al ser más veterano llegó a la internacionalidad una década antes que Simón y es uno de los guardametas en los que se pudo fijar el del Athletic. Simón respondió con nota en la primera mitad y en la segunda quedó vendido en el gol de Yamal.