El fútbol tequila ha vuelto con su máximo esplendor. Con solo dos disparos a puerta, uno ha acabado en gol, y con hasta cinco intervenciones salvadoras de Rajkovic, el Mallorca ha ganado por segunda vez en esta edición de LaLiga y la primera en Son Moix.
Por fin Larin se ha estrenado con la camiseta bermellona. Después de quince encuentros y cinco titularidades, el canadiense ha conseguido anotar su primer gol en LaLiga. Y llegó en una acción con una posesión de treinta y ocho segundos para los locales donde Larin controló con la derecha y disparó un zurriagazo con la zurda desde dentro del área, imposible para el meta sevillista. El delantero canadiense cumplió con la ley del fútbol de un delantero con sequía: las fáciles fuera, las difíciles dentro.
Rajkovic, el héroe
Aunque Larin marcara su primer gol con la camiseta bermellona, el héroe destacado de la primera victoria en casa fue Predrag Rajkovic. Si la temporada pasada marcaba Vedat Muriqi, esta vez lo ha hecho Larin, pero el salvador sigue siendo el mismo: Predrag Rajkovic. El portero serbio paró todo lo válido: remates de cabeza, disparos desde la frontal, salió a los centros y robó el balón en un mano a mano con En-Nesyri.
El Mallorca necesitaba un partido con efectividad en las dos áreas para recuperar la confianza en una forma de jugar que ha tardado ocho partidos en sonreír en casa. Un portero que salva y un delantero que marca lo poco que le llega: Rajkovic y Larin han devuelto el fútbol tequila a Mallorca.