Gorka Carrera no olvidará nunca el 30 de noviembre de 2025 y tampoco el número 42, ya que ese día y con ese dorsal debutó con la Real Sociedad en Primera división, después de estar haciendo méritos para ello con el Sanse en Segunda. El delantero de Errenteria, que no tuvo la fortuna de disponer de algún buen balón en los 18 minutos que disputó para demostrar su olfato goleador, se mostró muy feliz por cumplir el sueño de muchos niños guipuzcoanos.
Carrera, que había sido una de las grandes novedades en la convocatoria de la Real para recibir al Villarreal, una cita para la que Sergio Francisco tenía las bajas de Mikel Oyarzabal, Orri Óskarsson y Jon Karrikaburu, sus tres delanteros, ocupó de inicio un sitio en el banquillo de un Anoeta en el que pasó de jugar ante 1.000 personas, el pasado lunes contra el Valladolid, a hacerlo con 30.000 en las gradas.
Todo apuntaba a que al canterano txuriurdin le iba a tocar esperar su oportunidad en el banquillo, porque Guedes apuntaba a jugar de ariete y, si no lo hacía, Sadiq Umar podía tener una oportunidad, como así fue, pero en la segunda parte saltó a calentar y en el minuto 77 le llegó el momento de hacer realidad su sueño de debutar con la Real y en Primera división.
El de Errenteria salió con 1-2 en el electrónico y tuvo la suerte de celebrar el 2-2 sobre el verde, en el que dejó algunos detalles interesantes, aunque no pudo disponer de una ocasión, pero el gol de Moleiro en el último minuto empañó un poco más su estreno en la élite, al ser con una derrota.
Carrera, que apunta a volver a tener minutos con la Real este miércoles en la eliminatoria de Copa del Rey en Reus, escribió esto en una red social. “Un sueño hecho realidad. Eternamente agradecido por el apoyo. Ahora toca seguir trabajando”.
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