Joan Francesc Ferrer, ‘Rubi‘, recogió este miércoles el Premio Miguel Muñoz como el mejor entrenador de la temporada 2021-22 en LaLiga SmartBank. Un premio entregado al entrenador que devolvió al equipo indálico a la máxima categoría del fútbol español. Es el segundo de su carrera tras el recibido por su gran temporada con el Huesca en la temporada 2017-18.
El equipo andaluz fue el primero en confirmar su ascenso en la Categoría de Plata y acabó primero en la clasificación con 81 puntos, igualado con el Real Valladolid. Un regreso ansiado que se produjo tras siete años en el segundo escalón del fútbol nacional. Fue el tercer ascenso de la historia de la entidad.
Rubi se mostró muy agradecido por este segundo premio, al que da la misma importancia que el primero. «Saben muy bien los dos porque me hacen especial ilusión viendo las dificultades que tenemos los técnicos para recibir alegrías. Los dos los pondría al mismo nivel. Es cierto que también considero que es muy difícil decir quién es el mejor entrenador porque es un poco subjetivo, pero este premio de MARCA me enorgullece muchísimo. Ojalá pueda volver a por otro«, apuntaba antes de la gala.
«Trabajar y conseguir el objetivo»
Esa fue la respuesta que dio el entrenador a Felipe del Campo tras recibir el prestigioso trofeo. En dicha entrega también se mencionó su paso por varios banquillos de equipos españoles y en donde el entrenador dijo que prefería entrenar en LaLiga Santander antes que entrenar en LaLiga Smartbank.
Vamos a saber vivir sin Sadiq
Tras el ascenso del curso pasado, Rubi sabe que tiene un importante reto en forma de permanencia, con una plantilla joven y sin demasiada experiencia:»Es un reto importante y difícil porque hay muchos que no han jugado en esta categoría y tenemos una política de fichajes de gente joven y ahí hay mucho trabajo por hacer».
Lo que tiene asumido es que tendrá que ser sin el que era su estrella: «Vamos a saber vivir sin Sadiq, por supuesto. Siempre se lo digo al equipo: si él iba a marcar 15 goles, ahora tienen que hacer tres jugadores diferentes cinco cada uno y tenemos que ayudar todos».
Después de recibir el trofeo, Rubi y su portero Fernando Martínez se fueron de la gala puesto que se volvían a la ciudad de Almería directamente porque tienen que preparar el choque del viernes en San Mamés.