El Athletic parece haber solucionado los problemas de gol que tanto le penalizaron durante el pasado curso. A la irrupción de Gorka Guruzeta (5) se le suma el acierto de jugadores como Williams (5), Berenguer (3), Nico Williams (3) y Sancet (3), todos ellos jugadores que estuvieron por debajo de sus cifras esperadas el pasado curso liguero. Más allá de eso, hay jugadores que deben dar un paso al frente en este aspecto para dividir la responsabilidad goleadora entre más efectivos. Raúl García (1), Villalibre (0) y Muniain (0) son los más destacados de esa lista. Todo ello hablando siempre del campeonato de liga.
En el caso de Raúl García, es cuestión de afinar en los remates. Dispara 6,49 veces cada 90 minutos, pero estos no son de calidad. Solo suma 1.0 xGOT (una métrica que mide la calidad en la ejecución de los tiros). Eso sí, tampoco es que disponga de grandes ocasiones, al menos hasta el momento. Está 0,74 goles por debajo de lo esperado (1,74XG). Sin embargo, su aportación al juego del equipo está siendo positiva, puesto que suele participar con frecuencia en jugadas que acaban con disparo en una situación clara. Lo positivo para el Athletic es que volverá a la liga tras haber marcado ante el Sestao River.
Muniain, por su parte, todavía no sabe lo que es ver puerta en la temporada actual. De los cuatro tantos y 11 asistencias de la campaña 21/22 ha pasado a un único pase de gol en la 22/23. Pese a rematar poco (2 cada 90 minutos), sus ocasiones suelen ser de calidad (2,46XG). Lo que hace más llamativo que su casillero de goles siga en cero. En el resto de acciones, Muniain sigue siendo un jugador influyente en el juego del Athletic. Sus datos en ese sentido son superiores a los de Sancet, Berenguer o Nico Williams, por citar unos pocos. Da 2,22 pases que acaban en tiro y su participación en las secuencias de pases genera casi un gol esperado (0,83) cada 90 minutos. Números que indican que podría recuperar su plaza en el once más pronto que tarde.
Por último, Asier Villalibre es una caso difícil de analizar. Solo ha disputado 111 minutos en 13 jornadas, una cantidad demasiado pequeña para sacar cualquier tipo de conclusión. En esos pocos ratos ha rematado en cuatro ocasiones con un XG de 0,43. Datos positivos que no le han permitido tener continuidad, menos aun con la aparición de Guruzeta. Sería muy positivo para el Athletic que estos tres jugadores mejorasen su aportación para poner mantener el nivel ofensivo cuando el resto atraviesen peores momentos de forma, algo que de momento no ha ocurrido. La visita al Betis será una buena oportunidad para comprobar si eso se mantiene.