El Athletic celebra esta temporada su 125 aniversario con el objetivo deportivo «de seguir siendo un equipo campeón y estar entre los grandes». La declaración del presidente Jon Uriarte es un anuncio de intenciones que marcará el plan estratégico del club para el periodo inmediato. La base de la estrategia es clara. «La ambición. Aspiramos a ganar títulos, logrando de manera recurrente clasificaciones europeas. Queremos ser referencia mundial en cantera con una inversión fuerte en talento para atraer y retener jugadores. Queremos ser opción prioritaria para todos los jugadores de Euskal Herria», defendió el presidente.
La clasificación para la que sería la tercera final de Copa en las cuatro últimas ediciones y la posibilidad de recuperar un título que no se gana desde la década de los 80 es uno de los asideros es uno de los elementos más cercanos para definir esa fortaleza. La necesidad de no perder atractivo va acompañada de la obligatoriedad de ofrecer resultados, recurrentes clasificaciones europeas, que es un territorio que lleva tiempo sin disfrutar, y optar a títulos.
El club, según avanzó el presidente, ha reforzado el área de captación de la entidad en un proceso más complejo por eso de que aumenta la competencia y, además, se ha rebajado el índice de natalidad. La estructura deportiva que pretende mejorar el futuro de la entidad contará desde marzo con la incorporación de un Director de Rendimiento, encuadrado como tercer pilar del área deportiva por debajo del CEO y a la misma altura que los responsables de Lezama y Desarrollo. La figura del Director de Rendimiento aunará un sector que englobará cuestiones como dietética, nutrición y fisiología.