Cyle Larin ha caído de pie en Valladolid desde su llegada en el mercado de fichajes de invierno. Sus goles y su gran trabajo en cada partido han permitido al equipo blanquivioleta mantenerse en la lucha por la permanencia, lo que le ha servido para ser reconocido por la afición, que le ha elegido el mejor jugador del Pucela por segundo mes consecutivo.
Tras recoger su último premio, el canadiense pasó por sala de prensa. Allí analizó el empate ante el Mallorca, quejándose de la dureza rival: «Parecía que estaba en un combate de boxeo, recibí muchas faltas. Tenía siempre dos defensas encima, pero creo que lo hice bien». A pesar de ello, no quiso levantar la voz contra los árbitros: «No me voy a quejar, en cada país tienen su estilo. Si jugamos bien no tenemos que estar pendientes de ellos».
El protagonista reconoce que el aterrizaje de Pezzolano en el banquillo no ha variado mucho su papel: «Tengo el mismo rol que antes de la llegada del nuevo entrenador. Han cambiado algunos detalles, como las posiciones que ocupamos o la intensidad de lo entrenamientos».
Larin se mostró también optimista sobre el compromiso del próximo sábado en Villarreal: «Claro que es posible ganar. Si jugamos bien y estamos serios lo podemos conseguir. Confío mucho en el equipo y creo que vamos a sacar la situación hacia adelante».