
Rubén Baraja y el Valencia han llegado a un principio de acuerdo para que el técnico vallisoletano entrene al equipo blanquinegro las dos próximas temporadas. Las conversaciones avanzaron la semana pasada, aunque no ha sido hasta este lunes por mañana cuando se han aceptado los términos más importantes en los aparecen los dos años de contrato.
Rubén Baraja expuso la semana pasada al director técnico, Miguel Corona, y al director corporativo, Javier Solís, cuáles eran las premisas por las que le gustaría asentar el proyecto que le gustaría liderar en el Valencia como entrenador. Después de haber logrado la salvación del equipo en una temporada agónica, el técnico había pedido dos días de relax antes de empezar las reuniones para su renovación. A este encuentro, que duró más de cuatro horas, no pudo asistir la presidenta Layhoon Chan, que sí había dado instrucciones a sus dos ejecutivos antes de viajar a Singapur.
Aunque tanto Solís como Corona tenían unas instrucciones de la presidenta, el principio de acuerdo al que se ha llegado tiene que validarse aún desde Singapur.
Después de la primera toma de contacto, en la que Baraja expuso unas líneas maestras para continuar en el Valencia, fue su agente Manuel García Quilón el que tomó las riendas de las conversaciones que iban más encaminadas más a los años de contrato -dos en firme pedía el técnico- y el salario del técnico. No hay que olvidar que Baraja no negoció ninguna condición para firmar por el Valencia el 14 de febrero, ni en duración de contrato ni en cantidades económicas. De hecho su vinculación laboral terminaba al finalizar la temporada, a pesar de haber salvado al equipo.
Rubén Baraja ha expuesto en las reuniones que ha mantenido con los ejecutivos del club la importancia de reestructurar la plantilla alrededor de futbolistas que tengan calidad y que no desequilibren el Fair Play Financiero del club. De hecho, ha solicitado que el club trata de solucionar las salidas de los jugadores con los que no cuenta antes de la vuelta al trabajo. Además, ha pedido que el club exponga públicamente los objetivos teniendo en cuenta el nivel de la plantilla que se conforme finalmente.