Como en una partida de póker. Las Palmas, tras ver sus cartas, ha movido ficha. Ahora espera que la mesa hablé. La cesión de Julián Araujo está a un paso de anunciarse, pero hay más opciones encima de la mesa. En la portería ya hizo su trabajo con Aarón Escandell. Tiene un acuerdo con el jugador, pero no con el Cartagena. Ahora le toca al portero tensar la cuerda para salir. Las Palmas tiene claro hasta dónde puede llegar, y ese tope ya lo saben en la costa mediterránea.
En cuanto a la delantera, la situación es similar con el Midtjylland. Sory Kaba quiere jugar en Las Palmas, pero el club danés ha pedido una cifra bastante alta en términos económicos. Las Palmas ha trasladado una nueva oferta que ronda el millón de euros y que, a diferencia de la anterior, activa varias cláusulas por las que el Midtjylland saldría beneficiado. Aquí también hay una línea que los canarios no van a pasar. Como sucede con Aarón, el club espera que sea el jugador el que haga presión.
Más complicada es la operación con Mika Mármol. García Pimienta está como loco por tenerle en su plantilla, pero aquí entran en escena, además del propio jugador, otros dos equipos. Con Mármol ni siquiera está claro el acuerdo. El agente del defensa le ha trasladado a la UD sus condiciones. De ser aceptadas, todavía quedaría el acuerdo con el club. Y en este caso hay dos vías.
Andorra vía Barça
Mika Mármol pertenece al Andorra, pero el Barça tiene la opción de repescarlo. Esta sería la vía más sencilla para ver al jugador de amarillo. Y es que el Barça, que no cuenta con el defensa- todavía le debe dinero a Las Palmas por Pedri. De hacerse ese movimiento, Mármol entraría como moneda de cambio. Una operación a tres bandas que sería demasiado agresiva entre estos dos clubes -Andorra y Barça- como para llevarse a cabo de esta forma. Eso sí, Las Palmas no tiene todas las fichas en esta jugada. Paralelamente, el club negocia con otros centrales que también gustan en la dirección deportiva.