Como de costumbre, el Betis se prepara para un cierre frenético de mercado. La escasez de recursos económicos y la necesidad de reforzarse para intentar afrontar con mayores garantías la segunda mitad de curso en busca de sus objetivos han obligado a los verdiblancos a agitar su plantilla en busca de salidas que le permitan generar el margen suficiente respecto al límite salarial para intentar dar un salto de calidad, en especial en lo que al ataque de la plantilla de Pellegrini se refiere.
Con el regreso de Chadi Riad y Sabaly a la vuelta de la esquina, la recuperación de Miranda, las buenas noticias sobre la lesión de Ruibal y la versión cada vez más mejorada de Sokratis, sin olvidar la figura de Bartra y su posible vuelta al grupo a finales del próximo mes, el Ingeniero considera que su defensa, con números mejorados respecto a cursos anteriores, está bien cubierta. Pero cree que a su equipo le está faltando gol, y es ahí donde se centran las operaciones que el club tiene sobre la mesa.
La más cercana a concretarse, la marcha como cedido de Borja Iglesias al Bayer Leverkusen. En Alemania y fuentes próximas al entorno del futbolista dieron ayer por sellado un acuerdo verbal, a falta de firma, que incluiría una opción de compra de ocho millones de euros en función de distintas variables. Aunque en el Betis aseguran que aún restan algunos detalles por pulir en el día de hoy, cuando están previstos nuevos contactos, y que no completarán el movimiento hasta tener cerrada la llegada de un sustituto.
Desde Italia hay cierto interés por Rodri, que ha perdido mucho protagonismo en el equipo en las últimas semanas. Y aunque estas consultas no se han trasladado aún en una propuesta formal, no se descarta que equipos como la Fiorentina o el Genoa hagan alguna intentona por el de Talayuela en los últimos días de esta ventana invernal de transferencias. Mientras que todo parece a punto para que Juan Cruz haga las maletas rumbo a Leganés a préstamo, también con opción de compra.
Aunque el nombre más relevante para el Betis en este mercado es el de Luiz Henrique. Después de que se abriera una especie de puja entre varios equipos de Brasil, sin que ninguno terminara de convencer al Betis, llega ahora interés desde clubes europeos por el brasileño, a quien en el Benito Villamarín han tasado en 20 millones de euros (de los que recibirían un 85%, ya que el otro 15% sigue en poder de su club de origen). Una venta así sí permitiría a la Dirección Deportiva verdiblanca acometer contrataciones importantes.
Son varias las opciones para la delantera en las que trabaja el club para poder sellar la marcha de Borja al líder de la Bundesliga. Mientras que el nombre de Pablo Fornals, petición expresa de Pellegrini, vuelve a la palestra. Muchas negociaciones abiertas, vinculadas unas a las otras por los problemas de límite salarial, que convierten en frenéticos estos días hasta que el 1 de febrero a las 23.59 horas el mercado invernal eche el cierre definitivamente y la plantilla para la segunda vuelta quede conformada.
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