Las protestas organizadas contra Peter Lim en Mestalla acabaron de la peor manera posible: con enfrentamiento entre aficionados del Valencia. La convocatoria de manifestación se basó en intentar dejar el campo vacío durante el partido para transmitir una imagen muy potente a nivel mundial. No sucedió. Hubo menos gente de lo habital en Mestalla y cogiendo con pinzas la cifra dada por el club, algo más de 36.000 que no se acercó a la realidad (muchos pasaron el pase y no entraron) sí es cierto que la convocaroria no fue la esperada.
Con todo, miles de aficionados se quedaron fuera protestando durante todo el partido. Con el escenario deportivo que se vivió sobre el césped, muchos de los hinchas del equipo que decidieron sí entrar al campo se marcharon de sus butacas antes de tiempo. En ese momento hubo gran tensión, ya que empezaron los insultos y los cánticos contra los que habían decidido animar al equipo desde dentro del estadio. «No vaís a salir», cantaban. Hubo algunos lanzamientos de objetos y la policía tuvo que intervenir en varias ocasiones protegiendo a los que salían de dentro del estadio.