El Athletic descuenta hojas de calendario para el debut de Liga con una semana de amistosos de importancia. Este miércoles los leones se han medido al Aston Villa y el sábado cerrarán ronda de preparación ante el Stuttgart, que además de tener importancia en sus respectivas ligas son equipos de competición europea. La cita ante los villanos se ha saldado con derrota . El plan europeo de este Athletic que el 31 de agosto conocerá sus rivales para la primera fase de la Europa League necesita todavía de un ajuste, pues ha perdido los dos partidos que le han medido ante rivales con billete continental: Sporting de Portugal y Aston Villa.
Los leones no terminaron de soltarse. Todavía juegan lejos de esa alegría que el curso pasado les permitió levantar la Copa o llegar al tramo final del campeonato todavía a escasa distancia de los puestos de Champions. Les falta un chispazo. Más todavía ante un rival como un Aston Villa que sí se maneja en modo competición. Los de Emery tardaron menos de 5 minutos en adelantarse por mediación de Ramsey tras un gran pase al espacio de Tielemans. Hasta entonces los de Valverde habían hecho de sombras de un equipo que enseñó todo lo que vino después: salida de balón con juego de tres, rápida circulación con sentido vertical y búsqueda de prolongación a la banda. Así llegaron todas las opciones del Aston Villa.
El Athletic, sin la continuidad que sí ofrecieron los de Birmingham, vivió a tirones. Por ejemplo, el que propuso Berenguer, obligando a una buena parada a Gauci, en el minuto 8. El Aston Villa marcó de nuevo en el 15′, pero el tanto de Rogers fue anulado por fuera de juego. Un minuto después Sancet piso el área con intención y con remate, aunque en ambas ocasiones desviado. Primero con un remate a pasae de Yuri y después tras un servicio de Iñaki Williams.
Esas dos acciones y un par de internadas de Djaló, en una de ellas porfiando con Bogarde, fueron los mejores argumentos ofensivos de un Athletic que empató en el minuto 25 tras una jugada en la que Paredes entró con todo para dar viveza a un balón en el área del Aston Villa y Yeray, que fue al que le cayó la pelota, embocó en la portería de Gauci. Llegó a tiempo el central para poner equilibrio a un partido que poco antes había estado en serio riesgo para el Athletic tras una combinación por banda derecha que Bogarde no acertó a rematar.
La vuelta del descanso tuvo un paréntesis, casi como para permitir que los aficionados pudieran echar un ojo a sus dispositivos móviles para ver la final olímpica de 3.000 obstáculos, aunque coincidiendo con el desenlace el recién entrado Philongene puso de nuevo en ventaja al Aston Villa. La jugada, una de tantas que ya se habían anunciado en el primer periodo: buscar verticalidad en la banda y pisar área. Esta vez el extremo londinense evitó el centro y se la jugó con disparo acertado.
El Athletic, que en el intermedio sólo había variado con la entrada de Guruzeta por Djaló, tenía que recuperar distancia. Lo hizo pronto. Y por medio de Guruzeta ,que marcó su primer gol del verano. El donostiarra estuvo a la altura de todo lo que demostró la pasada campaña con un remate a centro de Iñaki Williams. Valverde tiene que frotarse las manos por todo lo bueno que debería traerle la competencia entre Djaló y Guruzeta.
Esa buena sensación mudó en escalofrío cuando en el minuto 84 Padilla se quedó en el suelo tras hacerse daño en el antebrazo de la mano derecha tras una buena parada a tiro de de Iling Jr. El escalofrío de Valverde tuvo dos motivos: lo que podía haberle pasado a Padilla y también la forma en que se había producido el ataque del Aston Villa. Luego ya fueron sudores fríos con el gol anulado a Archer por ajustado fuera de juego en carrera con Duñabeitia, que acababa de salir y terminó con una lesión muscular del joven central. Luego Archer no falló en el contragolpe que tuvo en el 88′. Clavó a Lekue y Padilla y firmó la victoria de los villanos.
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