Ronald Araujo regresó a Barcelona y adelantó su vuelta a los entrenamientos ya que este miércoles acudió a la Ciudad Deportiva a pesar de que hasta el domingo no estaba citado al igual que el resto de sus compañeros. Una prueba del compromiso del uruguayo. Además, dejó claro que se quiere quedar en el Barcelona. Hay que tener en cuenta que hasta el próximo 15 de este mes su cláusula baja a los 70 millones de euros y algún club podría pensar en pagarla. Pero Araujo quiere Barça y cuando se le preguntó si iba a seguir en el club la respuesta fue clara: «Por mí, sí».
La decisión del jugador provoca que haya ‘overbooking’ de centrales en la plantilla. Flick tiene en estos momentos a Cubarsí, Íñigo Martínez, Araujo, Christensen y Eric García. También está Jules Koundé, pero el francés solamente jugaría en el centro en caso de emergencia porque es lateral derecho desde hace dos años. Cinco centrales son demasiados. Es cierto que son los mismos de la pasada campaña, pero entonces tanto Araujo como Christensen comenzaron la temporada lesionados. De hecho, el danés solamente pudo reaparecer en el tramo final.
Los intocables
El Barcelona tendrá que desprenderse de alguno de ellos. Cubarsí e Íñigo Martínez son intocables. Fue la pareja titular a lo largo de la temporada con un rendimiento muy alto. Sorprendente fue Íñigo Martínez que, además de jugar a un gran nivel, se ha convertido en uno de los líderes de la plantilla. Ambos tienen el puesto asegurado. Lo mismo que Araujo una vez que ha decidido quedarse. Es cierto que no estuvo bien el pasado año, pero también salía de una lesión y entró en el equipo muy tarde.
En la cuerda floja
Todo hace indicar que Christensen será el que salga. Le queda un año de contrato y el Barcelona vería bien una venta y sacar algo de dinero. El Barcelona estuvo a punto de venderlo el pasado mercado invernal, pero una recaída de su lesión lo impidió. Con el danés hay dos problemas. El primero es que después de un año en blanco no es fácil encontrar comprador porque siempre habrá dudas sobre su estado físico.
Christensen, en el partido frente al Real Madrid.
El Mundial también juega
Por otra parte, queda por ver si él quiere irse. Le resta un año de contrato y si sale en 2026 podrá llevarse una prima de fichaje. El problema es que si se queda en el Barcelona y no juega, que sería lo más probable, su presencia en el Mundial peligraría. El jugador tendrá que tomar una decisión al respecto. Cuando este miércoles le preguntaron a la salida de la Ciudad Deportiva si va a seguir en el Barcelona, el futbolista no respondió.
Eric García y Hansi Flick.
Eric García
Y luego está el caso de Eric García. La idea de la Dirección Deportiva es renovar al jugador. A Flick le gusta y ya evitó su marcha en invierno cuando estuvo a punto de irse cedido al Girona. Contó con él y el jugador realizó un excelente final de temporada. Además, actuó en varios partidos como lateral derecho a un buen nivel. Su polivalencia es un factor a tener muy en cuenta.
Mercado abierto
Cuando todavía queda algo más de mes y medio para que cierre el mercado, el Barcelona tendrá que tomar decisiones aunque lo más probable es que no sean inmediatas a la espera de ver cómo están físicamente los jugadores o si se produce una lesión. Pero lo que está claro es que ahora sobran centrales en la plantilla.