El Athletic mira la inmediatez del derbi, que será su primer partido de noviembre, consciente de que a partir de ahí tendrá todavía un mundo en la temporada. Y más todavía después de conocer cuál será su plan en la primera semana de diciembre. La Liga ha fijado para el 3 de diciembre el partido adelantado ante el Real Madrid, el 6 de diciembre, todavía sin horario determinado, el equipo repetirá en San Mamés con el Atlético y el miércoles 10 diciembre recibirá al PSG en Champions.
Los tres partidos que abrirán diciembre aceleran la intensidad de un calendario sin tregua que el Athletic afronta con las dudas de los resultados y de no haber encontrado todavía una fórmula redonda de juego. Valverde ha elegido esta semana para reorganizar interiormente al equipo, fortalecer sus bases y encontrar soluciones a las lagunas advertidas en una racha vacía de victorias (1 en 7 partidos de Liga) que ha tenido varapalos en San Mamés en forma de derrotas ante Alavés y Getafe.
La charla en el vestuario del martes ha tenido continuidad este miércoles porque hasta la ventana FIFA de noviembre el equipo se verá obligado a un ritmo constante porque al derbi le seguirá la visita a Newcastle y el partido en San Mamés ante el Oviedo. Después del descanso competitivo por los partidos de selecciones, que en el caso del Athletic tendrá el añadido de que muchos de sus jugadores estarán en el amistoso de Euskadi con Palestina, al equipo le caerán de golpe varios órdagos. Y es que antes de la semana bomba de diciembre, la vuelta del parón le medirá con el Barcelona, antes de una salida de Champions ante el Slavia y un nuevo partido de Liga con el Levante.
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