LaLiga está de vuelta. Lo hace después de uno de los parones más atípicos de su historia. Tras la disputa del Mundial de Qatar, los torneos domésticos vuelven a ser los protagonistas y en España lo será desde esta tarde. El primer duelo será cosa de dos proyectos emergentes en Primera, pero con una idea de fútbol más que consolidada, con grandes resultados, y que iniciaron con buen pie la temporada.
Girona y Rayo cruzan de nuevo sus caminos después de una historia reciente más que vinculada. Ambos han sido los dos últimos equipos en llegar a LaLiga Santander a través de los playoffs, protagonizando el duelo de la penúltima final por el ascenso. Después de una remontada para el recuerdo, el Rayo de Andoni Iraola volvía a la máxima categoría. Ascendía tras terminar sexto en la fase regular, misma posición que le valdría al Girona para regresar a Primera un año después.
Al plano deportivo, se une el lazo de Míchel Sánchez, bautizado como ‘Míchel I de Vallecas’. El técnico madrileño es historia de la Franja, con la que disputó la friolera de 425 partidos oficiales como jugador, para posteriormente sentarse en el banquillo durante una temporada completa y otras dos incompletas. Vallecas espera impaciente al partido de vuelta y rendirle la ovación que merece, pero mientras el balón ruede, no hay recuerdos que valgan y el único objetivo es el de ganar. Para el encuentro, el de Vallecas tendrás las bajas de los centrales Bernardo y Juanpe, Ibrahima Kebé, Javi Hernández y Reinier Jesús, todos lesionados.
Dos equipos con propuestas atractivas, libretos de juego parecidos y separados por seis puntos y cinco posiciones. Gironís y franjirrojos acabaron LaLiga en una buena dinámica de resultados y no conocen la derrota desde el mes de octubre, por lo que perder implicaría poner fin a una racha de cuatro jornadas sin perder para los catalanes y de seis para los madrileños.
El Rayo, que sí estará en dieciseisavos de Copa, llega pendiente de las bajas y con su columna central tocada. Sin Catena y Óscar Valentín, ambos sancionados, además de Nteka y Salvi lesionados, Iraola tendrá que reinventarse tanto para formar la zaga como el centro del campo. Precisamente, tampoco estará el de Usurbil en el banquillo, al tener que cumplir su segundo partido de sanción, tras la roja sufrida ante el Real Madrid. No habrá reencuentro físico entre dos ilustres de la historia del Rayo, pero sí táctico sobre un Montilivi que vivirá el reestreno de LaLiga.
Iraola, la bestia negra del Girona
El Girona se volverá a ver las caras con Iraola, una auténtica bestia negra para los catalanes que solo han podido batirlo una vez en los siete encuentros que han disputado con el exjugador del Athletic en los banquillos o del Mirandés, o del Rayo Vallecano. En el único partido que los blanquirrojos superaron al de Usurbil, poco les sirvió a los gerundenses. En el curso 2020/21, el Girona venció en Vallecas en la ida de la final de los playoffs de ascenso (1-2) pero en la vuelta los madrileños remontaron la eliminatoria para hacerse con el ascenso a primera división.
El cuadro de catalán siempre ha topado con un Iraola que ha tomado la medida al equipo. Ya con el Mirandés, la temporada 2019/20 se llevó los tres puntos de Montilivi (0-3) en el primer precedente. En el último, el vasco se llevó el gato al agua con el Rayo Vallecano en los octavos de final de copa del año pasado (1-2). En el duelo de liga de esta campaña, el Girona luchará por llevarse los tres puntos y encadenar tres victorias en el campeonato después de despedirse con dos triunfos antes del parón del Mundial de Qatar cuando ganó al Athletic Club (2-1) y al Elche (1-2).