Sebastián Beccacece ha sido presentado hoy como nuevo entrenador del Elche, es el cuarto entrenador del cuadro ilicitano esta temporada y el sexto contando a Alberto Gallego y Mantecón como entrenadores inquilinos. La diferencia es que el argentino llega con la idea de liderar el próximo proyecto la temporada que viene, presumiblemente en Segunda División.
En su presentación ha dejado claro que viene con la intención de hacer un gran proyecto deportivo: «Lo que tratamos de representar es compromiso mutuo, trabajar en equipo y que la gente se sienta representada. Hemos encontrado un grupo con una actitud notable con deseo de absorber al máximo cada concepto y con mucha predisposición al esfuerzo. No es el mejor momento, pero vamos a trabajar duro para salir de esa realidad. Contamos con la convicción del grupo de pelear hasta el último momento».
También ha agradecido la confianza del propietario y representante Christian Bragarnik y del secretario técnico Sergio Mantecón, el cual ha mencionado que el Elche y Beccacece tendrán «un camino muy exitoso».
«Somos conscientes de la realidad, es un momento que cumplimos 100 años, pero también percibimos esa actitud manifiesta por dar lo mejor. El grupo está con deseo de tomar cada idea, hemos encontrado esa tolerancia de recibir a un nuevo entrenador«, ha comentado el entrenador sobre cómo ha percibido al equipo tras dos días al frente del equipo.
El técnico argentino no ha querido fijarse en un esquema de juego cuando se le ha preguntado sobre ese asunto, se ha definido como un entrenador variante en función del tiempo y del espacio, pero con un equipo que tenga claro un perfil y una idea. Por lo que no se enrocará en un sistema fijo como tenía acostumbrado Pablo Machín con tres centrales y dos carrileros.
Tras entrenar durante toda su carrera en Sudamérica, ahora le llega la primera experiencia en el fútbol europeo de la mano del Elche, algo que no será un impedimento para plasmar sus ideas: «Llevo 20 años sólo en Sudamérica, hemos estado en diferentes países y culturas y en definitiva el fútbol me ha enseñado que es universal. Más allá de las características hay ciertos patrones que se repiten y ahora me siento como en casa».
La situación deportiva del conjunto ilicitano es crítica, muy hundidos en la clasificación a falta de 12 jornadas y salvo milagro el equipo descenderá. Pese a ello, Beccacece ha reconocido que sabe la situación en la que está pero que viene con la idea de recuperar esa confianza: «Hay una memoria que hay que recuperar, por lo menos intentarlo. En el fútbol hay que insistir y para eso hay que trabajar, ser muy convincentes y revelarse a la adversidad para soñar con pelear hasta el último momento. Yo creo que la calma y la tranquilidad van a ser fundamentales para lo que queremos».
Por último, se ha definido como un tipo cercano con el futbolista: «Me considero muy cordial, muy atento de cada uno de ellos, lo que pase fuera no puedo controlar. Mi legado en el fútbol siempre ha tenido que ver con ser cercano a los futbolistas, hacer un grupo unido que coopere y represente a la afición. Todo lo que pasa hacia afuera no pretendo controlar porque es imposible como las opiniones ajenas. Estamos muy conectados con cada integrante de este lindo desafío».