El documento de LaLiga reflejó 14 incidentes en el estadio Benito Villamarín de Sevilla, en el que en ocho ocasiones unos 1.500 aficionados locales, ubicados en los sectores centrales de Gol Sur Grada Baja, donde se sitúan los grupos «Supporters Gol Sur» y «Grada 1907», cantaron «corrupción en la Federación», sin que fuera secundado por el resto de espectadores.
También reprodujeron insultos dirigidos al árbitro del partido, Guillermo Cuadra Fernández, y cánticos ofensivos contra el Barcelona y el Real Madrid por parte del mismo grupo de seguidores locales.
La denuncia de LaLiga menciona igualmente los insultos que unos 500 aficionados locales del partido Barcelona-Girona, integrantes del grupo de animación «Espai d’Animació», dirigieron en varias ocasiones al árbitro del encuentro, Antonio Mateu Lahoz, así como el cántico «odio al Espanyol» y otros hacia ese club.
RFEF y antiviolencia
LaLiga remite cada semana un escrito de denuncia al Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y a la Comisión Antiviolencia con aquellos cánticos que se producen en los encuentros que inciten a la violencia o tengan un contenido insultante o intolerante.
Estos cánticos aparecen recogidos como comportamientos prohibidos y por tanto sancionables, tanto en el Código de Disciplina Deportiva de la RFEF como en la legislación contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.