Cavani y el Valencia acercan posturas: Boca espera impaciente

Edinson Cavani y el Valencia siguen acercando posturas para llegar a un acuerdo que permita al jugador desvincularse del club de Mestalla a cambio de un porcentaje del contrato de la próxima temporada. El abogado de Cavani -en quien ha delegado la negociación Fernando, agente y hermano del jugador- ha mantenido la reunión más fructífera de las últimas semanas. Aún hay asuntos de índole económica que pulir, pero la actitud de este último encuentro hace pensar que la negociación ha entrado en una fase de relajación de las posturas que ha sido muy bien recibida por el club. Desde el Valencia explican que todas las partes están cediendo para llegar a un arreglo.

A quien más urge este acuerdo es a Boca, club en el que acabará jugando Cavani, que tiene el sábado 29 de julio a las 0:00 hora española como plazo límite para registrar al jugador en la Copa Libertadores -para eso debería estar libre- y el lunes 31 de julio a la misma hora para presentar toda la documentación correspondiente.

Desde que Baraja comunicó a Cavani que no contaba con él para el próximo año y el jugador rechazó propuestas que superaban ampliamente lo que tenía firmado con el club blanquinegro la negociación se convirtió en un tira y afloja para intentar que el Valencia pagara un mayor porcentaje del último año de contrato a cambio de que el jugador firme la rescisión.

Porque una vez que supo que no iba a jugar en el ValenciaCavani eligió la opción más difícil de encajar desde el punto de vista económico. Además de sentirse seducido emocionalmente por jugar en la Liga Argentina con Boca, las conversaciones con el director deportivo xeneize, Juan Román Riquelme, terminaron de convencer al jugador uruguayo. Para Cavani cambiar Europa -o descartar Arabia- por Argentina es una cuestión personal y, casi, de experiencia vital.

Y desde entonces, un abogado que representa los intereses de la familia Cavani (al futbolista y a Fernando, su hermano y agente) es el que lleva las negociaciones con el Valencia. El club de Mestalla siempre entendió que tendría que abonar un porcentaje del contrato que le resta por cumplir, pero la diferencia entre ambas posturas era el guarismo de ese tanto por ciento. También había una gran diferencia con el hermano que pretendía la comisión íntegra correspondiente al último año, una exigencia que el club no estaba dispuesto a cumplir y en la que también habrá tenido que ceder.