El Athletic busca soldados de gloria para el Metropolitano. Ausente Sancet, que es el pichichi del equipo y se pierde el partido por lesión, el equipo tirará de habituales –destaca Berenguer, autor del gol que adelantó a los leones el curso pasado en el primer envite de la semifinal de Copa- y contará con nuevos protagonista. Entre ellos sobresale la pujanza de Jauregizar, que lleva una temporada mostrándose, y la capacidad de sorpresa de Maroan, que es un recién llegado. Es el elemento desequilibrante que tiene Valverde para apretar defensas y tratar de dominar el área. El pasado domingo se estrenó como goleador de Primera ante el Valladolid.
Maroan (24 años) llegó al Athletic el pasado mercado de invierno en una operación de rendimiento inmediato. El club rojiblanco pagó cerca de 4 millones de euros al Alavés, que era el club con el que tenía contrato aunque la primera mitad de esta temporada la jugó cedido en el Barakaldo, con 11 goles marcados en Primera RFEF. El acuerdo con el Alavés incluye una compensación a futuro por objetivos. El Athletic también se hizo cargo de los 300.000 euros de penalización que tenía el futbolista por romper la cesión con el Barakaldo.
Nacido en Vitoria, Maroan hizo pruebas con el Athletic cuando era un niño, pero entonces no le abrieron la puerta de Lezama. Su buen hacer en el filial del Alavés y sobre todo su confirmación en el Barakaldo han llevado al Athletic a dar el paso para fichar a un delantero que no tiene: 192 centímetros de granito. El elefante africano, le apodó Bittor Llopis, el que fue su técnico en uno de los equipos de último tramo formativo de Alavés.
Maroan formará en la próxima convocatoria de una selección de Euskadi que trabaja por tener al menos un partido en 2025 aunque su objetivo es entrar en la rueda de la selección de Marruecos, que es el país de sus padres. Valverde quiere estirar al máximo su potencia y le ha dado dos titularidades en los últimos tres partidos para que el delantero se vaya haciendo al equipo y sus compañeros, de igual modo, se hagan familiares a su manera de proceder sobre el césped.
El escaparate del Metropolitano es su carta de presentación a los grandes partidos de la Liga y también la puerta al debut europeo el jueves en Roma. Serán dos noches especiales para este delantero que profesa la religión musulman y que este viernes inició el Ramadán. Todo lo bueno que persigue Maroan en dos partidos con tanto atractivo es un escozor de pena para Sancet. El pichichi del Athletic en esta temporada (13 goles en 21 partidos de Liga y 14 en los 26 del curso) estará varias semanas fuera por una lesión muscular. Llegaba lanzado ante el Atlético y le ha frenado un percance muscular.
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