Saúl Ñíguez lleva tiempo con un objetivo en la cabeza: reencontrar su fútbol. Pese a estar dentro de los planes de Simeone estos últimos años en el Atlético, aunque lejos del protagonismo de sus primeras temporadas, el jugador ilicitano sabía que sólo tomando una decisión arriesgada en su carrera podría ayudarle a reconducir la misma. Y el Sevilla es la opción elegida por Saúl y su entorno desde hace semanas, con una motivación doble, tanto en la dirección deportiva como en el banquillo. Víctor Orta y García Pimienta, garantía para recuperar su mejor nivel.
Porque Saúl, que llega mañana al aeropuerto de San Pablo (09.10) y en principio será presentado el miércoles, ha desestimado propuestas de España y de fuera del país. Opciones de mayor calado económico. El interior jugará cedido en el Sevilla, después de que el Atlético frenase su desvinculación del club con dos años más de contrato. Existía el clásico temor a una gran revalorización. La reducción de su salario ha sido drástica. Hubiese firmado lo mismo de hacerlo con un nuevo contrato de tres temporadas. Unos emolumentos al estilo Sergio Ramos el pasado ejercicio, apostando por encima de todo en jugar en el Sevilla.
Mucho ha tenido que ver Aarón Ñíguez, hermano de Saúl y amigo personal de Víctor Orta, desde que coincidieron en el Elche como capitán y director deportivo, respectivamente. Aarón confesó en una llamada al sevillista el deseo de su hermano de jugar en Nervión, de sumarse a un proyecto que se iba a reiniciar, con el paralelismo de la carrera del centrocampista. El salario de Saúl echaba para atrás a Orta, aunque le confesaron que se adaptaría a la realidad del club andaluz, aunque debía moverse con máxima celeridad. Dicho y hecho. Operación cerrada. No en las condiciones que deseaban el Sevilla y el propio Saúl (cesión), pero uniendo sus caminos.
Con la llegada de Saúl a Sevilla, ya serán cuatro los futbolistas nuevos que tenga García Pimienta a sus órdenes, entrenador con quien su nuevo pupilo tiene grandes deseos de trabajar. La idea del Sevilla es continuar con esta velocidad de crucero en las llegadas y marcharse de gira con más refuerzos. El pasado año llegaron sólo dos antes del primer viaje, ambos firmados durante la temporada por Monchi. Víctor Orta está ante su primer verano completo. Es su planificación y la siente como tal. Saúl llega con su aval y con el objetivo de relanzar su carrera y el rumbo del Sevilla.
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