El portugués Cristiano Ronaldo no ha logrado alcanzar el récord de 9 goles del emblemático Eusébio como el jugador luso con más anotaciones en un Mundial. Cristiano, que volvió a empezar el partido en el banquillo, vio como hoy se evaporaba la posibilidad de alcanzar a Eusébio en el choque contra Marruecos que marcó la eliminación de Portugal en cuartos.
Tras lograr el récord de goles marcados por una selección nacional y el de mejor goleador de todos los tiempos, entre otros, el madeirense acudió a Qatar con la intención de batir una de las pocas marcas que le faltaban.
El actual capitán de las «quinas» llega a 8 goles en mundiales tras haber marcado una vez en Alemania 2006, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014, cuatro veces en Rusia 2018 y el que anotó de penalti en Qatar frente a Ghana.
Antes de que empezara el Mundial, Cristiano, de 37 años, consideraba que batir el récord de Eusébio sería «un buen reto». «Tengo mucho respeto por Eusébio. Todos los aficionados portugueses lo llevan en el corazón. Era una persona increíble. Si tengo la oportunidad, creo que Eusébio, en el cielo, estará contento y me deseará suerte para batir su récord», dijo entonces el crack portugués en una entrevista concedida al portal ‘Livescore’.
Preguntado de nuevo en Qatar, aseguró que sería «especial» pero no algo que le » quite el sueño»: «Puede sonar un poco vanidoso, pero yo no sigo los récords, los récords me siguen a mí», declaró.
Eusébio da Silva Ferreira, máxima leyenda del Benfica y una de las grandes figuras del fútbol portugués, alcanzó los 9 goles en una sola edición de la Copa del Mundo, en Inglaterra 1966, la única en la que participó y en la que fue el máximo goleador. Dos de esos 9 goles se marcaron en la victoria de Portugal por 3-1 contra el todopoderoso Brasil de Pelé, y 4 en el triunfo por 5-3 contra Corea del Norte, un partido en el que los portugueses empezaron a perder por 0-3 y que se considera en el país uno de los más emblemáticos de la historia de su deporte.
A pesar de otro tanto de la «Pantera Negra», que marcó en los seis partidos que jugó, Portugal cayó por 2-1 ante la Inglaterra de Bobby Charlton, que levantó el trofeo al final. Sin embargo, los lusos lograron el tercer puesto, su mejor actuación hasta la fecha, al vencer a la Unión Soviética (2-1), de nuevo con un gol de Eusébio.
Eusébio da Silva Ferreira nació en 1942 en Mozambique, entonces colonia portuguesa, y pasó la mayor parte de su carrera en el Benfica, con el que ganó una Liga de Campeones (venció al Real Madrid en la final de 1962) y 11 Ligas portuguesas, entre otros títulos.
Con 623 goles en 639 partidos, Eusébio también ganó el Balón de Oro en 1965. Su muerte, en mayo de 2014, conmovió y paralizó Portugal, y en 2015 sus restos fueron trasladados al Panteón Nacional, donde reposan grandes figuras de la historia portuguesa, como la fadista Amália Rodrigues.